jueves, 24 de febrero de 2011

Se lo suplico señor alcalde

No deja de ser triste que nuestro alcalde sea tan incompetente que lo malo que se dice de él siga siendo vigente durante todo su mandato. Lo escrito a continuación fue publicado por Cristian Valencia en El Tiempo en Septiembre de 2010, es decir hace casi seis meses. En aquel entonces lo leí y lo guardé para publicarlo aquí, pero por cosas de tiempo se me fue pasando y lo olvidé, hasta que en un arranque de orden me lo crucé de nuevo.

Fuente: http://bit.ly/eekOB3
Aún sueño con que llegue el día en que podamos hacer destituir al señor Samuel Moreno de la alcaldía de Bogotá, así sea un día antes de entregar. Como precedente sería fabuloso. Muy mal que los bogotanos seamos tan pasivos y nos dediquemos a ver cómo este señor acaba con lo que queda de ciudad.

Bueno, sin más alargues, los dejo con el texto de Cristian Valencia.






Se lo suplico, señor Alcalde 

Cuando empezaron a tumbar un puente a mordiscos era el momento de sospechar. Y lanzar un grito en el cielo. Pero no. Los noticieros de televisión mostraron el enorme saurio mecánico como una gran atracción, como si lo último en tecnología hubiera llegado a sacarnos de un atraso de marras. La máquina tenía unas enormes fauces que mordía el puente y arrancaba pequeños pedazos cada día. Parecía un monstruo diseñado por el mismo que diseñó a Lukas, el muñeco de Plaza Sésamo que devoraba galletas. Y nadie se preguntaba por otra manera más eficaz de demoler un puente. Por ejemplo, un badajo de acero, que con su pesado pendular sería capaz de tumbarlo en cuestión de ocho días. Y llegaban los curiosos a diario para ver al saurio trabajar, pequeñas multitudes extasiadas admirando la última atracción mecánica de un parque de diversiones.
Fuente: http://bit.ly/dSvLjx 
¿De quién era esa máquina? Lo ignoro. Pero sospecho que su dueño estuvo encartado con ella hasta que la pudo alquilar a quienes tenían la concesión de esa parte de nuestra antigua avenida El Dorado, para sacarle algo de dinero a un aparato tan inútil. Total, el puente fue derribado en dos meses y medio. Y así comenzó la destrucción de la avenida más bella del país, la puerta de entrada a la capital.
Después tuvimos otra opción de gritar, cuando después de un año no habían logrado construir la calzada de TransMilenio en tres cuadras, en la carrera 3a., entre la calle 19 y la calle 23. Hoy en día, casi dos años después, no está terminada; y entre la carrera 3a. y la 7a., la calle 26 parece el lecho seco de una quebrada. Y así, vimos cómo fueron abriendo frentes de obra por toda la avenida, ninguno terminado después de 18 meses. Todos nos preguntamos por qué no levantaron siete cuadras, trabajaron y terminaron, para después abrir otro, y luego otro; por qué tenían que infartar la ciudad de esa manera y enrostrarnos que seguimos siendo un país subdesarrollado, incapaz de llevar adelante una obra civil con alguna celeridad. En Doha, capital de Qatar, decidieron hacer un aeropuerto hace dos años, y está listo y funcionando hace seis meses. ¿Será cuestión de dinero? Lo dudo mucho. Porque las cifras que maneja el Distrito son astronómicas. Y parece que cuando quieren lo hacen bien y rápido: la carrera 8a., entre calles 8 y 12, fue pavimentada en una noche, días antes de la posesión del presidente Santos, porque esa sería la pasarela de toda la comitiva internacional; y junto al Concejo Distrital, pavimentaron todas las calles aledañas en cuestión de dos semanas, casi una cuadra por día.
Fuente: http://bit.ly/i8OiyG 
Ahora nos salen con el proyecto TransMilenio por la 7a., y dicen optimistas que estará lista en el segundo semestre del 2011. Con estos antecedentes, creo que tenemos razón en desconfiar. Y los trancones, y el desorden y el caos han logrado que perdamos la tranquilidad. Veo cómo los conductores y peatones están cargados de rabia. Y cualquier incidente se puede volver algo violento. No es extraño que la delincuencia esté disparada. Por la zozobra, y porque todo es feo. Lograron caotizar la ciudad en dos años, regresarla a la incertidumbre de los años 80, en tiempos de la Troncal de Pastrana, donde cada esquina era un atracadero. La rabia nace en el desorden, en los muladares que van dejando las obras, en el tiempo que se pierde en los trancones. En ese caldo de cultivo nace la delincuencia y nos volvemos enemigos todos.
No me explico cómo las obras no tienen tres turnos de trabajo, para que no paren de trabajar las 24 horas ni los días festivos. ¿Acaso no se dan cuenta de que se pierde más dinero con la ciudad infartada? Que el smog se instala en el ambiente, que la pitadera ensordece y neurotiza, que la basura desangela, y la esperanza se pierde. Una legión de habitantes descreídos que nos vamos volviendo rudos con el paso de los días, huraños y hoscos: violentos.
Y tan sólo nos queda suplicar porque no tenemos otra forma de reclamo: se lo suplico, señor Alcalde, se lo suplico.

jueves, 17 de febrero de 2011

Soy Anónimo

No todos saben que además de este blog -tan temático como un calentao, porque tiene de todo un poco pero por alguna razón a algunos les (nos) gusta-, manejo otro par de blogs. Uno se llama "Le pasó a un amigo" y en él se cuentan las historias de mi amigo Andrés con las mujeres. En principio lo empezamos a escribir con mi gran amigo Juan David Barrantes, pero al parecer él prefiere invertir su tiempo con  mujeres que escribir sobre ellas. No lo culpo. En mi defensa digo que hace mucho no actualizamos ese blog -casi seis meses- yo también lo prefiero. Pero tengo toda la intención de llamar a Andrés y preguntarle más vivencias.

El otro blog se llama "Soy Anónimo". En este blog se publican las historias que recibimos vía e-mail, de manera anónima (por eso el nombre del blog. Simpático, ¿no?). Allí han salido historias muy buenas, muy interesantes. Confesiones de visitas a bares swinger, amores con mayores, con menores, tríos. También hay -bastantes- desahogos sentimentales. Autores que aprovechan nuestro espacio para "madrear" a quienes no les han bien-correspondido. Hay de todo. Ha sido divertido leer estas historias y publicarlas. Yo siento que hay muchas más historias que merecen ser contadas pero que sus protagonistas no se han atrevido o animado a escribir. Ojalá se decidan y lo hagan. Seguro que varios de ustedes tienen alguna historia que los hace sonreír con picardía, aquella historia que sólo le contaron a su mejor amig@.

Estoy seguro que muchos de ustedes han pensado "uy, qué lástima no poderle contar esto a nadie". Claro, no se puede echar al agua a los demás. Hay reputaciones en juego. Aclaro que en el blog no utilizamos nombres propios -o los cambiamos- para proteger identidades. No se trata de armar escándalos nacionales. Por ejemplo, si alguien contara aberraciones sexuales de un tal "Hugo Chavez", en el blog podríamos cambiarla por algo como "el ilustre señor presidente de la Republica Bolivariana de Venezuela". Repito, es un ejemplo, no estamos para juzgar.

Para terminar, les cuento que andamos pensando en cómo abrir más espacios para que la gente cuente sus historias macabras y no tan macabras. Así fue que surgió la idea de hacerlo un programa radial. Estamos organizando todo y trabajando para lograrlo, para que cada quién se anime y nos cuente -sin dar su nombre- aquello que siempre quiso pero que nunca pudo contar. Eso de lo que se siente orgulloso, o avergonzado, o qué sé yo. Tan pronto tenga preparado todo, organizado el esquema, les estaré contando, para que pasen por ahí, nos escuchen un rato y quizás se animen a contarnos algo. Un par de whiskeys sirven.

lunes, 7 de febrero de 2011

En la balanza

Como algunos de ustedes saben, el año pasado me metí de cabeza en el proyecto Premios TWT 2010, que hicimos el 16 de Diciembre. Desde que hicimos los del 2009 sabía que quería hacerlo otra vez, mejorar muchas cosas, cambiar otras, etc. Fue muy emocionante poder vivir esa adrenalina de ir avanzando, aunque fue muy (muy) desgastante.

De hecho, lo más desgastante de todo fue posterior a los Premios porque, lamentablemente, quedaron muchos problemas. Durante un tiempo me alejé de twitter precisamente por tratar de solucionarlos. Hoy, cuando creo que ya la mayoría se superaron, puedo ver hacia atrás, tratar de verlo objetivamente y evaluar, poner en la balanza. Personalmente siento satisfacción porque el esfuerzo que se hizo demostró que sí se pueden hacer grandes cosas con pocos recursos. Que con ganas y con esfuerzo sí se puede.

Naturalmente detractores siempre habrá (algunos malintencionados incluso fueron colaboradores cercanos) y no se podrá tener a todo el mundo contento, pero yo me quedo con lo positivo, lo aprendido y, sobre todo, lo logrado. Sin duda Premios TWT fue uno de los eventos más grandes en la comunidad twittera de Colombia. Honestamente desconozco la experiencia de otros países donde también se han hecho premios a lo mejor de twitter, pero me atrevo a decir que fue uno de los más grandes en la región. Punto para Colombia. Logramos reunir una cantidad importante de twitteros, logramos darles un espacio para que fueran, una excusa para compartir con sus amigos. Sé de muchos que aprovecharon los premios para mostrarle a sus amigos 1.0 que twitter no significa ser autista.

Hicimos un evento en el que gracias a la comunidad pudimos entregar donaciones a personas que lo necesitan, a través de fundaciones como Mano Latente, Corporación Prohijar y Una sonrisa para el niño rural. Hicimos un evento para que la gente fuera sin exigirle un costo en la entrada (excepto por la donación que era voluntaria, además). Hicimos un evento en el que premiamos a los twitteros más reconocidos del país, todo esto con votaciones de la comunidad. Y gracias al apoyo de varias empresas, pudimos entregarle no sólo el reconocimiento sino también un obsequio a cada uno. Me enorgullece pensar que tantas personas nos apoyaron, tantas personas y empresas creyeron en nosotros y quisieron aportar. Entregarle a un ganador un celular, un televisor o una consola de video juegos es algo que me satisface y que, honestamente, no pensé que pudiéramos lograr. Pero esa es la naturaleza de este evento. Siempre hemos crecido. Este año pensábamos hacer algo supremamente sencillo, en la medida de nuestras posibilidades, pero con el pasar del tiempo, con el apoyo de cada vez más personas, nos dimos la libertad de empezar a soñar más en grande. Pudimos haber hecho un evento más grande, en un lugar más espacioso, pero preferimos ser prudentes e ir despacio.


Hicimos un evento en el que contamos con presentaciones de cuatro bandas/artistas de diferentes géneros, procurando darle gusto a la mayoría de personas. Gracias a Divagash, La Bermudez, 6 Peatones y Remember The King por todo. Creo que se hizo un evento con altos estándares (como dice @julitamartinez). La producción del evento la hicimos básicamente tres personas: Iván Rincón, Sandra Rodríguez y yo. Sin ellos dos sencillamente no habría podido hacer el evento. Ellos estuvieron siempre muy pendientes y pude darme el lujo de despreocuparme por muchos detalles y dedicarme a otros (como conseguir más marcas que nos permitieran darle un premio a cada ganador). Esa es la confianza que me generaron. Uno muchas veces prefiere no darle tanta libertad a una persona que conoce hace poco, pero ellos me generaron la confianza como para decirles "la producción es de ustedes, háganla y me dicen en qué les puedo ayudar". Y fue tal el apoyo de ellos que involucraron más personas, como @Guille_D.

Fue muy bonito ver gente recortando pajaritos en papel y pegarlos en todo el bar, ver niñas ayudando en la entrada poniendo manillas, contar con un coordinador de tarima, con un coordinador de audio y video, con una coordinadora general de producción. En fin, mucha gente involucrada y por pura pasión. Lo hicimos sin cobrar un peso. Los presentadores de cada categoría eran twitteros todos, famosos y no tan famosos. Tantas personas que creyeron en el proyecto, muchos ofrecieron su ayuda aunque lamentablemente no pude aprovechar su ofrecimiento (muchas gracias a todos por su ofrecimiento, como Tata, Maria Fernanda, Marco y tantos más). Por mí cada uno habría hecho un poquito de cada cosa, porque esto fue hecho para la comunidad de twitteros. Y créanme que hicimos nuestro mejor esfuerzo, trasnochadas, madrugadas, reuniones los fines de semana o en las noches, planeación, inversión, etc.
Gracias a Diana y Eduardo, gracias a Claudia, a la viceministra TIC María Carolina Hoyos, a Cindy, a Frank, Patricia, a Giselle, a Manuel.

Unos daticos generales:
  • En total votamos 49.502 usuarios de twitter, 93.180 veces.
  • Los Premios los mencionaron (hasta donde yo me he podido enterar) en La W (en los programas de Julio Sanchez, en "La Hora del Regreso" y "Amanecer W" de Marcela Alarcón. También en Radio Nacional, en la Super Estación, en La FM y RCN, en televisión en Canal 13. Nos mencionaron en ADN, Cromos, Dinero y La República.
  • Gracias a los Premios los twitteros pudimos salir en fotos de páginas como Rumba BogotáJungla Urbana, Revista P&M, entre otros. Los twitteros mojaron prensa (yo no salí en ninguna foto, que yo sepa).
  • El streaming lo vieron en 1975 computadores de más de 30 países. La locura, ¿no?


Por supuesto de todo se aprende, de los errores y aciertos. Y eso me queda. Los twitteros hemos demostrado muchas veces que podemos hacer cosas importantes. Ahí está el caso de las twitteratón (empezando por la original en Medellín, luego Bogotá, Cali, Barranquilla …), el Twitter Night Bogotá y el mismo 7D. Podemos hacer muchas cosas cuando queremos, pero también es bueno contar con el apoyo de la comunidad. Les pido ese favor. Apoyemos a la gente que se toma el trabajo de hacer cosas. Producir un evento grande no es fácil, querer hacer las cosas bien es un comienzo, pero el apoyo abierto de todos es importante. Para terminar, agradezco a todos los que me apoyaron, todos los que lo manifestaron, los que fueron al evento, los que se tomaron una cerveza, los que me compartieron su whisky al final (y casi me emborrachan en los 10 minutos que disfruté del evento), los que me ayudaron, las marcas que creyeron en nosotros y que lo siguen haciendo.

Sigamos haciendo cosas buenas, esforcémonos, ayudémonos entre todos. Dejemos las envidias de lado. Yo no he decidido si haré otros premios este año, pero sí les aseguro que sigo soñando. ¿Y ustedes?

Ellos ya siguen a la marmota

Marmotazos populares